Educado en la figuración más realista, se mostrará como un notable dibujante y grabador de retratos. En su mundo personal y onírico, se manifiesta una iconografía propia con un léxico surrealista: Mathxullama, denominación referente a toda una serie de figuras femeninas y masculinas tratadas en versiones diferentes; el Fafarreo, a su vez, se refiere a todo lo irreal tanto des del punto de vista plástico como literario. Conceptos que se funden cuando el artista se adentra en la más pura abstracción como acto de reflexión de la figuración plástica. Rasgos de artistas como el Greco, Tiziano, los cubistas, surrealistas, fauvistas, Matisse o Picasso palpitan en el trasfondo de su obra, donde cualquier temática deviene sólida y entera gracias a la sobriedad cromática.