El sello identificativo de su obra es un concepto: la duda. Fotografía que surca la incertidumbre. Trabaja con el mundo de las apariencias para cuestionar verdades que nadie refuta. Documenta el marco, lo anecdótico, para hacer creer que algo ha sucedido, aunque no sea así. Juega con la ambigüedad, mediante el mecanismo de la apropiación, para provocar reflexiones sobre la autoría. A través de la escenificación en un marco de influencias idóneas (prensa, museos, publicidad) logra enfatizar que, a veces, las lecturas son erróneas. Además de artista, Joan Fontcuberta es crítico, docente, comisario de exposiciones y escritor, fundador de la revista Photovision. Sus obras han sido exhibidas en museos de todo el mundo, como el Centre Georges Pompidou de París, el Metropolitan Museum of Art de Nueva York o el Art Institute de Chicago.