Maquetista y escultor formado entre París, Milán y Barcelona, es el creador de una de las trayectorias escultóricas más sugestivas y desconocidas de este último siglo. Gran parte de su trabajo se centra en el tratamiento de piedras y minerales como por ejemplo el mármol y el alabastro, aunque también ha realizado obras en madera. Su primera exposición se celebró en el año 1976 en la Galeria Cadaqués, pero no es hasta 1991 que empieza a firmar con el nombre por el que es conocido actualmente. En su producción más reciente, Farreras vacía el interior de sus piezas dejando que la luz las invada, por lo que las llama 'catedrales'.