Comienza su aprendizaje en la Escola Taller d’Art de su ciudad natal, Tortosa, y posteriormente lo hace en Barcelona, en el Cercle Artístic de Sant Lluc. Sin embargo, se considera un artista autodidacta, ya que ha enriquecido su formación con constantes viajes y exposiciones por toda Europa. En la década de los años setenta, desarrolló su propio lenguaje artístico y consolidó una importante trayectoria en la abstracción geométrica. Jaume Rocamora destaca por la creación de formas ordenadas y estructuradas con disciplina y rigor, en las que utiliza el dibujo, el collage y el gofrado, y en sus obras nos ofrece una visión única del espacio geométrico. Durante el decurso de su carrera, ha recibido reconocimientos de distintas instituciones, como la Bienal Iberoamericana de México (1980) y la International Bilan Art Exposition de Nueva York (1982 y 1984).