El pecado es una falta, una ofensa, una trasgresión plena y consciente de aquello que se tiene por bueno. Su etimología es muy reveladora: del latín 'pecco' (tropezar, cometer un error), del que deriva la palabra 'peccatum' (delito, falta o acción culpable). Sin embargo, a lo largo de la historia del arte este término ha trasmutado de manera significativa hasta el punto de que la sociedad líquida de hoy –tan hedonista e individualista– lo ha liberado para crear uno propio.
A partir de los siete pecados capitales –cuyo origen se remonta a las primeras doctrinas del cristianismo en un intento de educar la moral de los adeptos–, creadores y creadoras de todas las disciplinas –pintura, escultura, escritura, cine– han encontrado una rendija desde donde dibujar una gran constelación que evidencia su alienación con nuestro modus vivendi.
De esta manera, con la pereza, la envidia, la avaricia, la gula, la lujuria, la soberbia y la ira –los siete pecados capitales– nos proponemos apuntalar los puntos de encuentro y las divergencias entre obras pertenecientes a períodos cronológicos distantes, pero que son justamente portadoras del pensamiento estético, político y social de un período.
Por primera vez, fruto de un convenio de colaboración entre el Ayuntamiento de Olot y la Fundació Vila Casas, queremos trazar un itinerario que en esta ocasión se emplaza en el Museu dels Sants, precisamente, para poner de manifiesto cómo la culpa y la redención que arrastran sus protagonistas toman una nueva dimensión con los trabajos fotográficos internacionales y la escultura catalana del fondo de arte de la Fundació. Unos y otros, santos y personajes anónimos de un tiempo presente, nos invitan a leer en clave contemporánea el legado que, desde nuestra tradición cristiana, se asienta en el presente. Siete pecados capitales, o la capitalidad de los pecados, es la cuestión que queremos desvelar.
Inauguración: sábado 3 de julio, 18h. Museu dels Sants. Más información aquí.