La costa de los mosquitos es la primera antológica dedicada a la obra de Santi Moix (Barcelona, 1960), artista que reside en Nueva York desde el año 1986. La exposición, que presenta obras de las dos últimas décadas, incluye más de ochenta piezas, entre pinturas, acuarelas, cerámicas, esculturas e intervenciones efímeras en las paredes. Moix es un artista singular en nuestra escena por haber vivido tantos años en EE. UU., además de haber empezado su carrera en Japón, donde expuso seis veces en Tokio durante la década de los ochenta. Su obra se vio en sus inicios en la estela de los neoexpresionismos, aunque su naturaleza sea reflexiva o analítica, como la pintura de artistas como Luis Gordillo, Carroll Dunham o George Condo, entre otros.
La pintura de Santi Moix se sitúa a medio camino entre la representación y la abstracción. Su lenguaje tiene una apariencia expresionista pero, más allá de reflejar estados emocionales precisos, se convierte en una herramienta para crear un mundo imaginario mítico-poético paralelo, repleto de formas abstractas que parecen estar en constante transformación y que se mezclan con imágenes fácilmente reconocibles, como, por ejemplo, insectos, animales, ojos, ruedas o puentes. Todo ello está plasmado con un colorido exuberante, en el que el humor y el hedonismo tienen también un papel preponderante. Moix ha ilustrado además libros de autores humorísticos, como Miguel de Cervantes, Rabelais o Mark Twain, entre otros.
Exposición comisariada por Enrique Juncosa.
© Santi Moix. Colección particular. Fotografia: Pablo Román.