Inauguración: lunes 16 de septiembre a las 19 h.
Con motivo del cincuentenario de su muerte, la Fundació Vila Casas celebra una exposición antológica de Francesc Domingo i Segura (Barcelona, 1893-São Paulo, 1974), que ayude a completar la percepción del conjunto de su obra, con algunos aspectos hasta ahora desconocidos, y que represente su retorno de Brasil, tras haber asegurado: “No volveré a Catalunya hasta que no sea libre”.
Educado en un ateneo obrero, y superdotado para el dibujo, fue el catalizador de la Agrupació Courbet, grupo de jóvenes a los que el escenario noucentista y la influencia de Cézanne impulsa hacia las vanguardias. Miembro de la Escuela Catalana de París, su arte es fruto de la admiración por Picasso y de la asimilación íntima del arte románico catalán, en un plasticismo espiritual que lo sitúa en la tríada de la vanguardia catalana: Miró-Dalí-Domingo. De su opción por la figuración, con la poesía como inspiración de su obra –que es también punto de partida de poetas como Carles Riba, entre otros–, surge un realismo introspectivo, de delicada expresión lírica. La Guerra Civil lo conduce a ponerse sin miedo a la cabeza de los artistas, y su liderazgo en la llamada Revolució Catalana le acarrea más tarde el exilio. En São Paulo, como partícipe del Modernismo brasileño –que digiere las vanguardias europeas– y con el fin de producir un arte puramente autóctono, Domingo lleva a cabo su propia traducción cultural de la Virgen de Montserrat –la Moreneta– y las maternidades mediterráneas, y pinta, dibuja y graba multitud de maternidades negras y mulatas de Brasil. Además, funda el Grupo Bisonte, bajo la consigna de la unidad en la diversidad, con el que supera la dualidad arte abstracto/arte figurativo –creada por razones políticas– y transmite un mensaje universal de fraternidad entre artistas.
Exposición comisariada por Natàlia Barenys.
© Francesc Domingo: Mujer, c. 1927. Óleo sobre tela. Colección particular.