Licenciada en bellas artes por la Universidad de Barcelona, María José Cortés Antequera explora los detalles de nuestra cotidianidad a través de una pintura de tipo hiperrealista, que intenta mostrarnos el lado más intimista de todo lo que nos rodea a la vez que aporta un punto de vista casi mágico, mediante las tonalidades cromáticas y los plácidos juegos de luz que parecen transportarnos de manera fragmentada a los espacios silenciosos del alma.