Vinculada desde su infancia al sector farmacéutico, Jeanne Susplugas reflexiona sobre los fármacos, las drogas de nuestro tiempo. Testimonio de una sociedad hipocondríaca, evoca en sus imágenes la cotidianidad regida por las dosificaciones, los tratamientos y los suplementos alimenticios; mundo sumergido en las adicciones y hambriento de sustancias y sensaciones huidizas. Obras que juegan entre la ambigüedad que establecen los conceptos de salud y drogadicción.